bajo el agua tiendo a pensar mas claramente, asi que las mejores reflexiones me salen cuando estoy bajo la ducha.
el otro dia me puse a analizar la filosofia del amor...me vino a la mente una idea que todavia no me puedo acordar de donde la saque, pero bueno, era algo como que hay 2 posturas que una persona puede tomar frente al amor, ser amado o amante. no te puedo decir si es completamente cierto y valido en todos los contextos (todavia no se de donde sale la demostracion) pero por lo menos en mi corta historia amorosa nunca concretada me cerro.
te paso a comentar por que, mis experiencias creo que las puedo englobar en dos casos intercalados, o soy una amante en secreto o una amada en demasiado "no secreto"
en el primer caso (amante en secreto) mi problema es que nunca puedo superar ese temita secundario (solo secundario) del secreto. la sucesion de hechos es: me enamoro de alguien, me acerco (lo mas posible sin jamas revelar mis intenciones) y ahi me estanco, termino solo como una amiga (incondicional, siempre presente, siempre atenta, onda el boy scout de la amistad) a la que, obviamente, la terminan pasando por arriba otras, mas directas, abiertas, mas no se que. resultado: termino con un amigo con novia, lo que incluye conocer pormenores de la relacion que no me gustaria enterarme y, ademas, hacerme amiga de la chica en cuestion...
o, caso numero dos (amada en no secreto), la sucesion aca es la siguiente: conozco ocasionalmente a alguien, ese alguien se queda interesado, empieza a indagar sobre mi persona con terceros en comun, y ahora el problema se presenta aca, o bien utiliza a esos terceros para dar a conocer sus intenciones, cosa que me molesta terriblemente, o sea, por que tiene que ser tan cobarde como para necesitar que otro se declare ante mi por el; o si, se declara en persona,en persona oculta detras de una pantalla, pero bueno, en persona al fin, y al ser rechazado recurre a esos terceros para intentar convencerme, cosa que me pone de mas mal humor, mira que me van a terminar convenciendo, date por vencido o lucha vos en todo caso. resultado: termino completamente sola, y para peor, como la intencion del chico no tenia nada de secreto se entera todo el mundo,por lo que me tengo que soportar sus cargadas por algo que no sucedio ni remotamente.
conclusion final: mi problema es principalmete el dilema SECRETO/NO SECRETO, cosa que no termino de dilucidar, me puede explicar alguien para que mierda existe!!
11 de julio de 2010
5 de julio de 2010
8
Yo no tengo una personalidad; yo soy un cocktail, un conglomerado, una manifestacion de personalidades.
En mi, la personalidad es un especie de forunculosis animica en estado cronico de erupcion;no pasa ni media hora sin que me nazca una nueva personalidad.
Desde que estoy conmigo mismo es tal la aglomeracion de las que me rodean, que mi casa parece el consultorio de una quiromantica de moda. Hay personalidades por todas partes: en el vestibulo, en el corredor, en la cocina, hasta en el WC
¡ Imposible lograr un momento de tregua, de descanso!¡Imposible saber cual es la verdadera!
Aunque me veo forzado a convivir en la promiscuidad mas absoluta con cada una de ellas, no me convenzo de que me pertenezcan.
¿ Que clase de contacto pueden tener conmigo-me pregunto- todas esas personalidades inconfesables, que harin ruborizar a un carnicero?¿Habre de permitir que se me identifique con este pederasta marchito que no tuvo ni el coraje de realizarse, o con este cretinoide cuya sonrisa es capaz de congelar una locomotora?
el hecho de que se hospeden en mi cuerpo es suficiente, sin embargo, para efermarse de indignacion. Ya que no puedo ignorar su existencia, quisiera obligarlas a que se oculten en los repliegues mas profundos de mi cerebro. pero son de una petulancia... un egoismo... una falta de tacto...
Hasta las personalidades mas insignificantes se dan unos aires de transatlantico. Todas, sin ninguna clase de excepcion, se consideran con derecho a manifestar un rechazo olimpico por las otras, y naturalmente, hay peleas, conflictos de toda especie, discusiones que no terminan nunca. En vez de contemporizar, ya que tienen que vivir juntas, ¡pues no señor! , cada una pretende imponer su voluntad, sin tomar en cuenta las opiniones y los gustos de las demas. Si alguna tiene una ocurrencia, que me hace reir a carcajadas, en el acto sale cualquier otra, proponiendome un paseito al cementerio. Ni bien aquella desea que me acueste con todas las mujeres (aclaracion de la luna: hombres) de la ciudad, esta se empeña en demostrarme las ventajas de la abstinencia, y mientras una abusa de la noche y no me deja dormir hasta la madrugada, la otra me despierta al amanecer y exige que me levante junto con las gallinas.
Mi vida resulta asi una preñez de posibilidades que no se realizan nunca, una explosion de fuerzas encontradas que se entrechocan y se destruyen mutuamente. El hecho de tomar la menor detreminacion me cuesta tal cumulo de dificultades, antes de cometer el acto mas insignificante necesito poner tantas personalidades de acuerdo, que prefiero renunciar a cualquier cosa y esperar que se extenuen discutiendo lo que han de hacer con mi persona, para tener, al menos, la satisfaccion de mandarlas a todas juntas a la mierda.
O. Girondo
En mi, la personalidad es un especie de forunculosis animica en estado cronico de erupcion;no pasa ni media hora sin que me nazca una nueva personalidad.
Desde que estoy conmigo mismo es tal la aglomeracion de las que me rodean, que mi casa parece el consultorio de una quiromantica de moda. Hay personalidades por todas partes: en el vestibulo, en el corredor, en la cocina, hasta en el WC
¡ Imposible lograr un momento de tregua, de descanso!¡Imposible saber cual es la verdadera!
Aunque me veo forzado a convivir en la promiscuidad mas absoluta con cada una de ellas, no me convenzo de que me pertenezcan.
¿ Que clase de contacto pueden tener conmigo-me pregunto- todas esas personalidades inconfesables, que harin ruborizar a un carnicero?¿Habre de permitir que se me identifique con este pederasta marchito que no tuvo ni el coraje de realizarse, o con este cretinoide cuya sonrisa es capaz de congelar una locomotora?
el hecho de que se hospeden en mi cuerpo es suficiente, sin embargo, para efermarse de indignacion. Ya que no puedo ignorar su existencia, quisiera obligarlas a que se oculten en los repliegues mas profundos de mi cerebro. pero son de una petulancia... un egoismo... una falta de tacto...
Hasta las personalidades mas insignificantes se dan unos aires de transatlantico. Todas, sin ninguna clase de excepcion, se consideran con derecho a manifestar un rechazo olimpico por las otras, y naturalmente, hay peleas, conflictos de toda especie, discusiones que no terminan nunca. En vez de contemporizar, ya que tienen que vivir juntas, ¡pues no señor! , cada una pretende imponer su voluntad, sin tomar en cuenta las opiniones y los gustos de las demas. Si alguna tiene una ocurrencia, que me hace reir a carcajadas, en el acto sale cualquier otra, proponiendome un paseito al cementerio. Ni bien aquella desea que me acueste con todas las mujeres (aclaracion de la luna: hombres) de la ciudad, esta se empeña en demostrarme las ventajas de la abstinencia, y mientras una abusa de la noche y no me deja dormir hasta la madrugada, la otra me despierta al amanecer y exige que me levante junto con las gallinas.
Mi vida resulta asi una preñez de posibilidades que no se realizan nunca, una explosion de fuerzas encontradas que se entrechocan y se destruyen mutuamente. El hecho de tomar la menor detreminacion me cuesta tal cumulo de dificultades, antes de cometer el acto mas insignificante necesito poner tantas personalidades de acuerdo, que prefiero renunciar a cualquier cosa y esperar que se extenuen discutiendo lo que han de hacer con mi persona, para tener, al menos, la satisfaccion de mandarlas a todas juntas a la mierda.
O. Girondo
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